jueves, 18 de agosto de 2011

El precio del silencio

Abuso de publicidad oficial y otras formas de censura indirecta en América Latina
Asociación por los Derechos Civiles
Iniciativa Pro-Justicia de la Sociedad Abierta
OPEN SOCIETY INSTITUTE   NEW YORK




Este sistema de asignación de la publicidad oficial en parte resulta posible porque los funcionarios locales pasan por alto los procesos licitatorios y hacen las contrataciones directamente con los periodistas de su preferencia, lo cual es ilegal, porque no cumplen el requisito de ser publicados en Internet que marca la ley, y ello hace que el acceso a la información y el control ciudadano sean más difíciles.


En Colombia, los canales de TV, las radios y los periódicos utilizan un sistema de “cupos” por el cual pagan salarios mínimos (o directamente ninguno) y remuneran a los periodistas con minutos de aire o espacio en los medios gráficos que estos entonces pueden vender personalmente a los avisadores132 (algunos periodistas de radio y TV alquilan su espacio de aire
en radios y canales, y lo financian vendiendo publicidad a organismos gubernamentales y empresas privadas).
Mabel Morales es graduada de la Universidad Autónoma del Caribe y se ha desempeñado como directora de noticias de Radio RCN de Barranquilla durante los últimos 21 años.
“Hoy en día tengo un sueldo (…) que me alcanza para los chicles. La otra parte me la completan con cupos publicitarios que yo tengo que vender. Siempre ha sido así, desde que empecé en la radio”.
Cuatro funcionarios de la zona atlántica nos aseguraron que uno de los primeros criterios que tienen en cuenta al asignar contratos publicitarios es el nivel de audiencia, que obtienen de los medios locales134. No obstante, doce periodistas de la región de la Costa Atlántica y seis del departamento del Cauca afirmaron que los contratos por publicidad oficial se les otorgan con más frecuencia a aquellos que brindan coberturas periodísticas favorables al gobierno, en detrimento de quienes ejercen su oficio con independencia editorial.
Un periodista y ex funcionario del departamento de Bolívar, en la región del Caribe, nos expresó que “si tú sacas una información que no le gustó al secretario tal, te quitan la pauta de tu programa”136. Por ejemplo, el periodista de radio y TV Jairo Baena nos relató que la empresa semi-estatal de aguas en Cartagena le retiró la pauta oficial a raíz de sus coberturas críticas.
“Hace tres años que estoy vetado en Aguas de Cartagena, porque publiqué los sueldos de los altos ejecutivos”. Luego de esa publicación, Baena fue a la empresa a ver el estado de su cuenta por venta de espacios de publicidad, y la persona encargada del área de Comunicaciones le manifestó que no le pagarían los espacios que le adeudaban.
Edinson Lucio Torres es director del programa de noticias Vox Populi, en Radio Vigía, una emisora local de Cartagena, que cuenta con un segmento dedicado a recibir llamados de los oyentes, en el que los ciudadanos expresan sus preocupaciones y opiniones. Torres nos comentó que Aguas de Cartagena retiró y nunca reanudó la publicidad en su programa a mediados de 2005, en respuesta a los informes que se emitieron sobre la pérdida de hogares de los residentes de la zona provocada por la construcción de un acueducto local139. Aguas de Cartagena se negó a brindarnos la información que le requerimos acerca de su gasto publicitario, argumentando que por tratarse de un grupo privado no está obligado por las normas de acceso a la información.
Marco Aurelio Gaviria, jefe de prensa de la ciudad de Popayán, explicó que el alcalde asignaba la publicidad oficial basándose en los contenidos periodísticos. “El alcalde dice directamente ‘ayudemos a fulano, ¿este programa qué tal es, cómo trata la noticia?’; o ‘este estuvo siempre difundiendo nuestras noticias’. Cuando lo consultamos acerca de esta cuestión, el alcalde Víctor Ramírez Fajardo afirmó que los escasos fondos municipales destinados a publicidad se asignan siguiendo criterios “implementados bajo los lineamientos de la objetividad y la igualdad”. Tales criterios se refieren a “la cobertura del medio en el caso de la radio y la televisión, penetración y lecturabilidad para el caso de prensa escrita, frecuencia de emisión, área de influencia, seriedad y cumplimiento”.
No obstante, el alcalde no negó las afirmaciones de su jefe de prensa.
Dado que en muchas localidades la pauta publicitaria del sector privado es mínima, los periodistas dependen de la publicidad oficial para un 50 o 60% de los cupos publicitarios.
“No podría vender todos mis cupos al sector privado porque tengo un noticiero y el sector privado prefiere las emisoras musicales; también, porque no tengo tiempo de salir a vender a las empresas; tengo un noticiero que dirigir”, expresó el director de noticias de una cadena radial de Cartagena144. Además, los organismos públicos pagan tarifas más elevadas que las empresas privadas. Según el periodista Fernando Carvajal Díaz, de Radio 1040, de Popayán:
Los noticieros viven en su alta mayoría de la publicidad oficial. Al primero que le ofrecen la publicidad es al alcalde y al gobernador, a las entidades oficiales. Empezando porque son las que más pagan. Los cupos del comercio son muy baratos. De acuerdo con el periodista radial Carlos Ardila, quien también trabaja como consultor de políticas públicas: Si yo no tuviera otros ingresos [más allá de los avisos del sector privado] claro que debería cerrar mi programa. [En Cartagena] la mayor parte de la pauta es oficial; si alguien se toma el trabajo de vetar a un periodista –en la adjudicación de fondos por
pauta publicitaria– sin duda alguna pudiera ser que se le cierre el espacio146.
Los periodistas de estas regiones generalmente se acercan al jefe de prensa o director de comunicaciones del gobierno municipal o departamental y, según los funcionarios, las decisiones a veces son tomadas directamente por el gobernador o el alcalde147. El periodista Noel Campos Muñoz, de Radio 1040 de Popayán, nos explica lo informales que pueden llegar a ser los procesos de contratación:
Nosotros [negociamos] directamente con ellos [los funcionarios]. Nos llaman y nos dicen: “queremos pautar en su programa y los esperamos por acá”. Nosotros inmediatamente vamos, negociamos la pauta e ipso facto está al aire. Inicialmente se hace el contrato en forma verbal, pero luego se formaliza en forma escrita para garantizar que nosotros les cumplamos con el servicio, y ellos nos paguen.
Para evitar tener que negociar directamente con los funcionarios, los periodistas de Cartagena y Barranquilla formaron dos cooperativas que representan a sus miembros en las negociaciones con el sector público. Estas asociaciones, que incluyen a varios periodistas con cupos publicitarios para vender, presentan propuestas a los organismos de gobierno. Una vez que el contrato está firmado, la cooperativa distribuye la publicidad a ejecutar y el correspondiente pago. Este mecanismo sólo abarca, sin embargo, un porcentaje pequeño de los contratos publicitarios celebrados por los periodistas en esas regiones. Si bien a través de ellos se evitan las negociaciones directas entre los periodistas y los funcionarios, no impiden la discrecionalidad en la decisión.
El 90% de los contratos publicitarios del gobierno de Cartagena en 2005 y 2006 fueron entablados directamente con los periodistas; la cifra alcanzó el 83% para la ciudad de Barranquilla, 71% para el departamento de Bolívar y 44% para el departamento del Atlántico. La periodista Alexandra de la Hoz, por ejemplo, firma sus artículos en el periódico La Libertad, de Barranquilla, como redactora de asuntos de gobierno. En 2006, recibió personalmente 17
millones de pesos (aproximadamente USD 6.700)149 en concepto de publicidad oficial de la Gobernación del Atlántico, así como otros 40 millones de pesos (aproximadamente USD 20 mil) abonados a una empresa de la cual ella es la única titular.
Este sistema de asignación de la publicidad oficial en parte resulta posible porque los funcionarios locales pasan por alto los procesos licitatorios y hacen las contrataciones directamente con los periodistas de su preferencia, lo cual es ilegal, porque no cumplen el requisito de ser publicados en Internet que marca la ley, y ello hace que el acceso a la información y el control ciudadano sean más difíciles.











martes, 9 de agosto de 2011

Adopción de parques y zonas verdes

Mientras en Cali, la Cámara de Comercio, tiene un exitoso programa de adopción de árboles y zonas verdes; en Santander de Quilichao, la comunidad está alarmada porque la Cámara de Comercio del Cauca pretende talar este hermoso bosque.



Mejorar el entorno paisajístico, proteger el medio ambiente, elevar el sentido de pertenencia de los caleños hacia los espacios públicos y zonas verdes, es el resultado del programa Adopción de Parques y Zonas Verdes que lidera la Cámara de Comercio de Cali desde el año 2005 y que ha encontrado en las alianzas público – privadas un apoyo para concretar acciones cívicas en favor del desarrollo de Cali. Adopción de Parques y Zonas Verdes, una expresión de civismo para Cali.
Hoy son 48 los lugares embellecidos y 1.913.605 los metros cuadrados recuperados gracias al programa ‘Adopción de Parques y Zonas Verdes’. Y es que con este programa se le ha dado un cambio al entorno paisajístico de la capital del Valle, se está protegiendo el medio ambiente y haciendo reflexionar a los caleños sobre el cuidado y uso adecuado de espacios públicos de la ciudad.
Y es que con este programa se le ha dado un cambio al entorno paisajístico de la capital del Valle, se está protegiendo el medio ambiente y haciendo reflexionar a los caleños sobre el cuidado y uso adecuado de espacios públicos de la ciudad. Esta iniciativa ha servido también para mantener y mejorar los separadores existentes en los corredores principales del MIO y los corredores viales del norte de la ciudad, gracias a un convenio que desde el 2008 se ejecuta con el Departamento Administrativo de Gestión Ambiental – Dagma. Esta alianza ha permitido la intervención de 404.000 metros cuadrados. Esta iniciativa ha servido también para mantener y mejorar los separadores existentes en los corredores principales del MIO y los corredores viales del norte de la ciudad, gracias a un convenio que desde el 2008 se ejecuta con el Departamento Administrativo de Gestión Ambiental – Dagma. Esta alianza ha permitido la intervención de 404.000 metros cuadrados.
Por qué vincularse al programa
La empresa tiene la posibilidad de involucrarse a actividades de responsabilidad social con la comunidad y el medio ambiente, con las que contribuirá a la calidad de vida de los habitantes del sector.
  • Los empresarios recuperan la inversión realizada en los espacios adoptados, a través del Certificado de Donación Ambiental que les permite descontar hasta el 100% de la contribución realizada sobre el impuesto a la renta. (Artículo 125 del Estatuto Tributario).
  • El adoptante recibe el reconocimiento de la ciudad y de las demás instituciones vinculadas al programa.
  • A través de este programa se han vinculado como ‘guardaparques’ personas de la calle y desplazados, que han encontrado en el cuidado y mantenimiento de las zonas verdes y parques una oportunidad para reintegrarse a la sociedad.
  • En el espacio adoptado se instalará una valla con el logo de la empresa adoptante.
  • La revista Acción, medio impreso de la Cámara de Comercio de Cali, publicará la información sobre el parque o la zona verde adoptada con los respectivos créditos a la empresa o comunidad adoptante.

7 pasos para adoptar un parque o zona verde


1.     Identifique cuál es el espacio público (parque o zona verde) que desea adoptar
2.     Comunique su interés en esta adopción a la Cámara de Comercio de Cali, al correo electrónico contacto@ccc.org.co o a los teléfonos 8861308 y 8861367.
3.     La Cámara de Comercio de Cali le presentará una evaluación del estado actual del parque y un presupuesto del costo de recuperación y mantenimiento mensual para su consideración.
4.     Acuerde las actividades a realizar, el tiempo de adopción y el presupuesto disponible.
5.     Formalice la adopción del parque o zona verde, a través de la celebración de un convenio con nuestra entidad, que le facilitará los trámites ante la autoridad ambiental local.
6.     Apruebe la imagen de marca de su empresa en las vallas a ubicar en el parque o zona verde adoptada.
7.     Realice los aportes convenidos mensualmente y reciba el respectivo certificado de donación ambiental que le permitirá beneficios tributarios.


Principio del formulario


Final del formulario









viernes, 5 de agosto de 2011

Quino, el caricaturista argentino autor de Mafalda, desilusionado con el rumbo que está tomando el mundo en cuanto a valores y educación, expresó su sentimiento al respecto...brillante!








La genialidad del artista produce una de las mejores criticas sobre la educación de los hijos en los tiempos actuales.....
Padres de Familia, Maestros, amigos: Reflexionemos, los invito a compartirlo.

martes, 2 de agosto de 2011

¿Refundar el capitalismo?.


“Las necesidades de los pobres deben tener preferencia sobre los deseos de los ricos, los derechos de los trabajadores sobre el incremento de los beneficios; la defensa del ambiente sobre la expansión industrial incontrolada; una producción que responda a exigencia sociales sobre una producción con objetivos militares” (Juan Pablo II).
 José Ignacio González Faus 
"La Vanguardia
"

Refundar o refundir: “this is the question”. Porque los grupos del 15M pueden haber cometido errores y generado desviaciones; pero todos esos fallos no nos autorizan para ignorar la enorme dosis de razón que tenían, al denunciar que los gestores de la cosa pública están aprovechando la crisis para poner en práctica aquella máxima de El Gatopardo: “cambiar todo lo que haga falta para que no cambie nada”. Y así cambiaron las palabras y siguieron tan contentos: el aristócrata Sarkozy ha sido en este caso un auténtico marqués de Lampedusa.

Si alguien quiere entenderlo mejor le recomiendo un libro de Luis González-Carvajal (El hombre roto por los demonios de la economía) que es de lo mejor que he leído sobre nuestra situación crítica. Y conste que no percibo ninguna dicotomía por este consejo.

El autor es una de las mejores voces del momento en ética social cristiana. Lo más irritante de él es que su lenguaje no es nada profético ni indignado sino tranquilamente gris: me recuerda a Francisco de Vitoria que, hablando siempre desde su despacho y sin los acentos atronadores de Bartolomé de Las Casas, llegó prácticamente a las mismas conclusiones que éste, y fue “padre del derecho de gentes”. O aquellos versos de Manuel Machado sobre Berceo: su prosa “es dulce y grave, monótonas hileras – de chopos invernales en donde nada brilla”.

Y sin brillo, pero con diafanidad cegadora, como si estuviera hablando de cosas intrascendentes como botones o cromos, llega a unas conclusiones que suenan a obviedades elementales. Pero esas obviedades queman tanto que nadie se atreverá a recibirlas en sus manos…

Allí se nos habla de ética y economía, de la moral cristiana sobre la propiedad, del mercado y de la globalización. Y resulta que el capitalismo es inmoral precisamente por su máxima eficiencia: porque esa finalidad del máximo beneficio se consigue aceptando que el fin justifica todos los medios. Y resulta también que la visión cristiana de la propiedad está más cerca del desplante de Proudhon (“la propiedad es un robo”) que de la doctrina neoliberal: porque la propiedad no es un derecho natural; el derecho natural es el destino común de los bienes de la tierra. Y la propiedad privada es un derecho positivo que sólo tiene vigencia en la medida en que sirve para realizar ese destino común de los bienes. Y el mercado necesita ser regulado “atacando audazmente los ídolos del liberalismo” porque “la dictadura económica se ha adueñado del mercado libre” (ambas frases de Pío XI).

Carvajal recuerda oportunamente que ya Marx subrayó que él no atacaba a los empresarios como personas, sino como personificaciones o hechuras de un sistema cruel porque está supeditado a la necesidad del máximo beneficio y a la competencia feroz para obtenerlo.

Cierto que, mientras existió el pánico a la amenaza comunista, el sistema se disfrazó como el lobo de caperucita, y aceptó reformas muy radicales como la de los impuestos progresivos. En tiempos de Nixon, las grandes fortunas norteamericanas llegaban a pagar un 70 % de impuestos. En los años de la caída del Este comunista y el ascenso de Ronald. Reagan llegaron a bajar hasta un 28 %. Se nos explica que, al bajarles los impuestos, las grandes fortunas tienen más capital para invertir y así crean puestos de trabajo. No hace muchos años nos cansamos de oír esas razones en boca del entonces ministro Acebes, con una sensibilidad tan poco cristiana como económicamente falsa: porque, al bajarles los impuestos, lo que hacen las grandes fortunas es prestar a los gobiernos que necesitan dinero, o invertir en ingenierías financieras que resultan más rentables, sacando así más beneficios de un dinero que moralmente no era suyo.

Si todo esto molesta, suavicémoslo con dos textos papales citados por el autor: “la Iglesia no pretende sostener pura y simplemente el actual estado de cosas, como si en ello viera la expresión de la voluntad divina, ni puede proteger por principio al rico y al poderoso contra el pobre y el desposeído. ¡Todo lo contrario!” (Pío XII). “Las necesidades de los pobres deben tener preferencia sobre los deseos de los ricos, los derechos de los trabajadores sobre el incremento de los beneficios; la defensa del ambiente sobre la expansión industrial incontrolada; una producción que responda a exigencia sociales sobre una producción con objetivos militares” (Juan Pablo II).

Hasta papas conservadores decían esas cosas que suenan tan de izquierdas. Otra cosa es que los católicos les hayan hecho caso. Bastante faena tienen con eso del preservativo ¿verdad?.